¡Plante un bosque con cada edificio!
Las fachadas están expuestas a numerosas impurezas orgánicas, desde excrementos de pájaros hasta gases de escape diesel. Pero no solo estas sustancias contaminantes ensucian y atacan la fachada. Existe otro material orgánico que ataca permanentemente al edificio pero que es difícil de detectar: NOx (óxido de nitrógeno).
Como componente principal del humo, además de ensuciar, el NOx también merma la calidad del aire de respiración. No obstante, cerca de una fachada de aluminio revestida con EcoClean™ las moléculas de NOx son atacadas por radicales libres. Estos radicales libres surgen por la reacción de la capa de dióxido de titanio (EcoClean™) con el agua y el oxígeno en el aire y oxidan las moléculas de NOx transformándolas en nitrato no perjudicial.
De este modo su fachada, además de evitar la suciedad en la superficie, también reduce la proporción de humo del aire y contribuye por tanto a un ambiente más limpio.
Ejemplo de la proporción de humo destruida mediante EcoClean™:
1.000 m2 de Reynobond®|Reynolux® with EcoClean™ destruyen tanto humo como unos 80 árboles. Esto se corresponde con la cantidad de gases de escape que emiten diariamente cuatro coches.